y amar es enamorarse de las diferencias
porque el amor no es un sentimiento sino una decisión
Apenas me atrevo a moverme.
Apenas los ojos, de una soledad a otra , los sueños oxidados, las flores de tus palabras amarillas, el agua de lluvia…que nunca podre ver correr por tu espalda. Propiciar ese descuido de la mente en el que asomará el recuerdo, una brecha en el estado de alerta de la vigilia. Volver, sin insistencia, rozar, pasar, simplemente, sin que las cosas noten mi presencia, permitirles su dominio.Y dejar que se seque el alma
El pasado es el pasado, no cabe menor duda, ese momento que nace y muere con el presente que vives y cuándo lo vives, solo él, revive en su memoria, renaciendo entre nombre, fragancias y aromas, evanescencias de lugares que ya no son ni están.Quedan atrás alegrías, esperanzas, pero también dolores y desencuentros, la forma que en si misma encierra la vida, desde su temple, desde su templo en el horizonte es constante, perenne, late en concordancia con la vitalidad de la vida, es su menester, solo a ella honra su encuentro, sin haber futuro, él nos haya, apenas desde la conciencia de que a su instante llegamos en un simple suspiro.
Apenas me atrevo a moverme.
Apenas los ojos, de una soledad a otra , los sueños oxidados, las flores de tus palabras amarillas, el agua de lluvia…que nunca podre ver correr por tu espalda. Propiciar ese descuido de la mente en el que asomará el recuerdo, una brecha en el estado de alerta de la vigilia. Volver, sin insistencia, rozar, pasar, simplemente, sin que las cosas noten mi presencia, permitirles su dominio.Y dejar que se seque el alma
El pasado es el pasado, no cabe menor duda, ese momento que nace y muere con el presente que vives y cuándo lo vives, solo él, revive en su memoria, renaciendo entre nombre, fragancias y aromas, evanescencias de lugares que ya no son ni están.Quedan atrás alegrías, esperanzas, pero también dolores y desencuentros, la forma que en si misma encierra la vida, desde su temple, desde su templo en el horizonte es constante, perenne, late en concordancia con la vitalidad de la vida, es su menester, solo a ella honra su encuentro, sin haber futuro, él nos haya, apenas desde la conciencia de que a su instante llegamos en un simple suspiro.
Cruz de amor que dominas mi mundo,
no es tu forma, sino tu peso el que por momentos me destroza con el fuego
de tus flechas clavadas aqui en mi pecho, eres carga insoportable, mensajero del cielo, ese que dice
ser el rey de los colores de los sentimientos, del que asi mismo se denomina agua de la vida, pero dime que me sirven tus alfombras de flores, tus mil colores tu inmenso brillo, de quién padece y vive sin ella
Estas letras son caminos de llantos, de lamentos, de desesperaciones, de penas, de emociones son letras de fuego. La huella, la marca temporal de los acontecimientos,porque de nuestros silencios,han nacido.
mirando por la ventana
del infierno, a través de los ojos de mi corazón,los padecimientos, de los sufridos sentimientos que el silencio mastica en ellos su alma, mi pena fue llevada mecida al viento,
desde la discordancia y disonancia de la razón, con la mentira engañosa,que un día rebosare en tus brazos, haciendo de esta una triste prosa de letanías que
ya no tienen apenas remedio, solo desde el silencio de su ruego y
oración constante, desde el recuerdo vivo de aquel que fue y dejo su vida,que entre amarguras,entre lágrimas escribió baladas de
tristeza, poniéndole música a la pena y al tintineo de sus aguas, que ya
nada son más que en el recuerdo y que desde el silencio absurdo del
juicio,desde la vida que tuvo fue contemplada sin apenas
merecer consuelo alguno ni calma, simplemente porque a parecer juicio no
tenia, a pesar de tener sentido de sentimiento.dándole consuelo, quizás a quién su amor incondicional en silencio se clara.Para aquellos que en
errores no quieran vivir y dar respuesta a la muerte inesperada, de
pretender suspirar por un momento más de aliento,para decirte amor lo mucho que te ama,del caliente corazón que tembloroso te hablaba.Quién sabe... Perdonando
el mal que me haces por lo bien que me sabes, asi es el constante
avatar interminable e incansable del amor, vivir hasta vaciar el corazón,
que sustenta la forma erguida del desear del Alma...
Porque sabes que nunca más, simplemente jamás volverá a ser
sin ti